En mi cama, que no duerme, cuando me vence el no sueño, sueño. Sueño con mis manos recorriendo tu cuerpo. Busco, bajo tu ombligo la dormida carnalidad que por derecho me pertenece. Con mis manos y mi boca le insuflo el hálito de vida que le hará resucitar. “Levántate…” le dirán mis caricias “…y revive para mí”. Así, con el pecado de la concupiscencia realizaré el milagro de la reanimación del placer dormido. Y con él pleno de vida, de fuerza, el amor se hará carne. Así caminaré sobre las aguas de la pasión y la lujuria que nos desborda y sobre los ríos de las lágrimas que llora mi almohada por tu ausencia. Transubstanciaré el almíbar que mana de tu cuerpo en generosa ambrosía. Devolveré a la luz a tus ojos dormidos y ciegos de mí. Sanaré las heridas de la desesperanza y el consuelo de no tenerme. En definitiva, te amaré como un milagro.
Y ahora con voz, que soy así de narcisa...jijijiji
Gracias de nuevo por estos sentimeintos....te he dicho ya que te ailovioooo??
Un sueño hecho voz. No me canso de oírla. Una voz que es un milagro.
ResponderEliminarUn placer escucharte.
Te persigo por los rincones de este mundo virtual buscando ese "algo" que me das. Y escucharte y saberte y tenerte en mi mente me hace un poquito más libre, y por eso escribo esta nota, aliviando un poquito mi pesar.
ResponderEliminarAys niñooossss...que sería de mi sin vosotros, en días como el de hoy en el que una se muere por un beso, venir por aqui y encontraros me hace sentir tan querida y especial...justo lo que necesitaba. Y pienso que si alguna vez os he hecho sentir algo parecido soy una mujer con suerte.
ResponderEliminarTodos los besos que seais capaces de soportar gustosa os los regalo...muacks