Barbie Super Star vs los potajes de mi abuela

"En el mundo actual se esta invirtiendo cinco veces mas en medicamentos para la virilidad masculina y silicona para mujeres que en la cura del Alzheimer. De aqui a unos años tendremos viejas de tetas grandes y viejos con penes duros, pero ninguno de ellos se acordaran de para que sirven".

Mas razón que un santo tiene el señor que dijo esto..... eso si que es escribir con conciencia....... por algo le han dado (aunque no se cuando) el Nobel de literatura..... solo por eso ya se lo merece todo, y el Principe de Beckelar tambien... si señor¡¡

Y es que aquí tenemos a toda una generación Barbie que tiene un pie en el modelo femenino de los años setenta, puritanos y machistas: consumista, de clase media, mujer-objeto, hiperfemenina.

Pero el otro pie lo tiene ya en los años 90 y en la revolución sexual: libre, profesional, sin hijos, ni marido, ni jefe, e independiente. "No es una mujer que se sacrifique por los demás, que aplace sus sueños por un anillo de bodas, por unos pañales o por nada más.

Es femenina y feminista. Un objeto y un sujeto. Pasiva y activa. Dependencia e independencia. Y creo que para las mujeres y niñas ésta es la esencia de lo que significa ser hembra en la sociedad moderna.

Constantemente te enfrentas a este tipo de tensión, entre ser independiente y ser una niña buena". La pregunta es si la mujer del siglo XXI - y la mujer occidental- sigue respondiendo a este modelo.

La preciosa muñequita que fue creada como el prototipo de mujer perfecta, de esbelta figura, sexy y en la vanguardia de la moda al tiempo que profesional competente con más de cien carreras, Barbie ha sido para muchas niñas- entre las que me incluyo- uno de sus modelos femeninos de referencia.

Y resulta que yo ahora tengo que estar feliz de la muerte por ser mujer trabajadora y ama de casa, con pareja e independiente, mamá y sexy….vamos que he crecido a caballo entre las lentejas de mi abuela y el McDonald´s de la esquina y ni soy una cosa ni otra - ni soy mi abuela, ni soy Barbie – en definitiva tengo todos los inconvenientes de mi abuela y ninguna de las ventajas de Barbie.

Y es que a la Barbie ventieañera se le han echado los 50 tacos encima….sin una arruga, eso si…sigue luciendo tersa su inmaculada piel de plástico y yo tengo que estar a la altura de dicho prototipo de mujer que en definitiva es lo que se espera de mi.

Trabajar como una burra fuera de mi casa con un horario esclavista y un sueldo tercer mundista y tener mi hogar como los chorros del oro, a la par de lucir siempre impecable y sexy, tener hijos y marido para gastar la mitad de mi sueldo en señoras de la limpieza y niñeras que los atiendan y hacer malabares con la ley de la gravedad y mis pobres tetas que están llamadas a besar el suelo – pero para eso eres una tia moderna…operate!!!- Pues es ya lo que me faltaba que no me dejen envejecer tranquila.

Y no es que esté en contra de la cirugía estética, no, lo que me irrita es que no nos dejen hacernos viejas, que darse un retoque está bien, si, pero que a las mujeres de nuestra generación nos han vendido la moto, pues también…que lo de inyectarse silicona debe ser una decisión personal tomada libre y voluntariamente y mucho me temo que en el 90% de los casos las mujeres toman esa decisión bajo la presión del modelo Barbie – en todos los sentidos - que se nos ha impuesto.

Pues a mi que me hagan un favor y me implanten en el cerebro la silicona que sobre de mis tetas.

P.D: !!!Yo de mayor quiero viagra para la cabeza........ y sudokus para la entrepierna¡¡¡